NO
TENGO NADA QUE PONERME
Una
mujer.
Europea.
Abre el
armario empotrado lleno de ropa de su dormitorio.
Las
prendas de la temporada no le valen: unas porque ella ha engordado, otras
porque no están de moda.
Aburrida
mira a su marido y le dice:
- - No
tengo nada que ponerme.
***
Una
mujer.
Somalí.
Lleva un
bebé raquítico colgando de su pecho seco y escurrido.
Entra en
su cabaña, en la que apenas hay un par de jergones en los que duermen 5
personas.
En uno
de ellos yace su marido, enfermo de malaria.
La mujer
le mira con tristeza y señala la falda llena de jirones que lleva puesta y le
dice:
- - No
tengo nada que ponerme.