El retorno de la moña
Secuela de la película anterior, en la que los mismos ladrones entran a
robar en otra casa distinta. Lo que no se imaginan es que el mismo tipo de la
pinícula anterior es el que está durmiendo en esta otra casa, pues ha cogido
otra moña parecida a la anterior; pero esta vez se ha ido a dormir a casa de un
amigo que es donde los estúpidos ladrones intentan robar de nuevo. El resultado
final es el mismo, por lo que vista la primera, vista la segunda.
Sin ser nada del otro jueves, ambas pinículas eran entretenidas con mucha
acción y puñetazos. El problema surgió cuando la esposa del productor, que
pertenecía al Ejército Femenino de Salvamento, se enteró de que el héroe del
film se pasaba todas las noches pimplando y eso era una desvergüenza que ella
no podía consentir. Llegó a llevarse a unas cuantas voluntarias uniformadas
para impedir el rodaje.